BOSTON - El Concejo Municipal de Boston votó a favor de la ordenanza promovida para limitar el alcance del programa federal "Comunidades Seguras", el cual permite la colaboración entre la policía local y autoridades migratorias al momento de la detención de un indocumentado.
Boston se convierte en la cuarta ciudad en Massachusetts, después de Somerville, Amherst, y Cambridge que ponen límites a las órdenes de detención de ICE.
El Concejo Municipal aprobó unánimemente la propuesta introducida el 9 pasado de julio por el concejal de Boston Josh Zakim, a la cabeza de la comisión de derechos humanos.
Su promotor aseguró que "es importante que este proyecto de ley pase hoy". A su juicio la urgencia de la legislación se debe al temor generalizado causado por la colaboración de la policía local con la agencia federal de inmigración.
Y añadió: "Nuestro deber es garantizar que estamos enviando un mensaje claro a la comunidad inmigrante, es seguro informar [a la policía] si usted es víctima de un delito."
"Este es uno de mis días más orgullo en el Concejo", dijo el concejal Tito Jackson. "Hemos visto esquemas 'ponzi' dirigidos a las comunidades de inmigrantes, las mujeres que han sido agredidas sexualmente, los hombres y las mujeres agredidos, y muchas de estas personas no han sido capaces de levantar un teléfono para llamar a la policía, eso no suena como una comunidad segura".
Inmigración
La concejal Ayanna Pressley agregó que el programa federal "Comunidades Seguras es una especie de oxímoron, por lo que muchas personas viven con el miedo y siendo víctimas de perfil racial. Como una ciudad que celebra el hecho de que somos 53 por ciento de personas de color, es genial celebrar esa diversidad, pero es igual de importante celebrar a nuestra comunidad indocumentada con un proyecto de ley como este".
El Alcalde Marty Walsh, un rival de mucho tiempo de "Comunidades Seguras" que se puso a prueba en Boston a partir de 2006, ha dicho previamente que firmará el proyecto de ley.
Aprovechando la aprobación de esta ordenanza los activistas pro inmigrantes están exigiendo que el presidente Barack Obama termine ese programa de cuotas de deportación controversial como parte de la actual revisión del Departamento de Seguridad Nacional.
Una amplia coalición de grupos apoyaron la campaña de "Boston Trust Act", incluido el Grupo de Inmigración de Boston y la Campaña para Restaurar la Confianza, que reclama una legislación similar a nivel estatal.
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